domingo, 31 de diciembre de 2006

 

listening: calle 13[atrevete]

"el tiempo es suerte.se acabo la suerte.era demaciado bueno para que durara"


don't fuck with us!

on the new ipod
vamos a cosechar nalgas de 14kilates

viernes, 22 de diciembre de 2006

 

listening: Tony de la Rosa[suspirando]

composure
wisdom
courage

 

listening: Cranberries[Dreams]

You broke your promise, You fucking talked to her about me

I don’t understand!
You could not do this on your own

I look like you wanna look, I fuck like you wanna fuck, I am smart, capable and most importantly, I am free in all the ways the you are not.
This isn’t possible. This is crazy.
People do it every day, They talk to themselves. They see themselves as they’d like to be.


Little by little you’re just letting your selves become

Now you see our dilema

 

listening: Fama[Ojitos Color Cafe]

como fue en el principio antes de todo

the start of something



"This is your life, and it’s ending one minute at time… if you wake up in a different time, in a different place, could you wake up as a different person?"

"All the ways you wish you could be, that’s me"


proximamente Juan Garza

nur.ein.traum

miércoles, 20 de diciembre de 2006

 

listening: Gary Hoobs[Otra ves me toco perder]

Dr. Flores
"Era un día normal, típico, rutinario, caluroso, aun había fuerzas, y espíritu renovado, pues, era martes y, hacia un día había descansado todo el fin de semana, de cierta edad para acá, ya es necesario hacerlo, como dice la gente, ya somos vacas mayores de 30 y por lo menos coincidimos el miércoles, el reloj principal no marcaba la hora, desde hacia ya mucho tiempo, pero eran las 10:35 am. Se cerro la puerta del 2b y una voz chillona rompió el murmullo de platicas en el ambiente ― Maria Guadalupe del Rosario González ― se paro una señora regordeta y entro, mientras se retiraba la señora que recién salio, con su pequeño hijo de escasos meses de nacido en un brazo y otro de no mas de 2 años en la otra mano.

Me encontraba como siempre en mi oficina, igual que todas, paredes blanco ostión, una pequeña franja verde a un metro del suelo, ese suelo que, pasaban limpiando dos veces al día. Me encontraba sentado frente a mi escritorio, viendo como se consumía el tabaco de mi cigarrillo y desprendía un hilillo de humo que tomaba formas y figuras que, a un niño con imaginación, podría entretener, con una pequeña ventana en la parte de atrás de mi oficina abierta para ventilar mi oficina dado que “estaba prohibido fumar” pero, yo si lo hacia, pues soy el coordinador de el ala sur de este centro. Termine el cigarrillo, y lo apague en el cenicero, abrí el ultimo cajón de mi escritorio, un escritorio, igual que todos los demás, metálico, color café claro, tres cajones del lado izquierdo y dos del lado derecho, No 030124 de activo fijo. y con la parte superior de madera pulida, a mi lado derecho, se encontraba una pared falsa con vidrio opaco en la parte superior, había un estante con libros distintos a mi espalda, en la pared posterior y esa pequeña ventana, por donde escapaba el humo de tabaco consumido, un día lo voy a dejar, volví a pensarlo, a mi derecha estaba colgado en esa pared siempre blanca, siempre igual, un pizarrón de corcho de 60 x 80 cm. donde estaban colocadas todas las notas y pendientes del mes, avisos y notificaciones varias, al frente la portezuela de aluminio y vidrio opaco terminaba por dar a mi oficina una vista monótona, igual a todas las demás de este centro, del ultimo cajón saque un spray aromatizante para que no se impregnara el olor a tabaco. Volví a dejar el spray, donde lo tome y, me puse a terminar de revisar los reportes, que me había entregado a primera hora del día, la señorita, recepcionista del 3b, sonreí y pensé, aun tengo el descaro de llamarle así, “señorita”, empecé a hacer garabatos, en esa hoja en blanco, mientras recordaba aquella, la ultima ocasión, en que, el viernes 7 de julio, de echo, fue en este mismo escritorio, entro por esa puerta y dijo con su voz, en tono, casi igual como los gatos cuando ronronean y quieren ser acariciados, ― Dr. Flores ¡ay es algo tarde pero quería ver si me podría!...― lo único que respondí, mientras me movía hacia ella ― Yo siempre puedo ―, todos los consultorios estaban ya vacíos, entro y…

Se estaciono, ocupando medio lugar de un espacio estacionamiento exclusivo para incapacitados, al fin y al cavo lo era. Obstruyo también la rampa de acceso a los mismos y subió los escalones corriendo de dos y de tres por zancada, el edificio es grande color café claro con vivos en verde militar y, su ya clásico, símbolo de un águila, por cierto, al borde de la quiebra, había asistido ahí desde hacia los últimos 3 o 4 meses, vestía una camisa blanca con rayas delgadas color café, desbotonada del lampiño pecho dejándolo a la vista, algo sucia y manchada, y mal fajada, un pantalón de mezclilla muy relavado y también sucio, calzaba una botas vaqueras, negras y muy usadas, tez aperlada, cabello negro y mal rasurado. En la camioneta, una Chevrolet Cheyene ´79 azul y con la polvera delantera derecha golpeada, sin parrilla frontal, y el parabrisas estrellado, el estereo encendido, dejaba escapar el ya famoso y original sonido de el acordeón y el bajo sexto usado en los corridos norteños, en la caja había latas de cerveza viejas y vacías y en el lado del copiloto había unas recientemente desechadas y en el asiento aun yacía una botella de Don Pedro casi vacía y unos vasos desechables.

Seguía pensando en ella y haciendo garabatos. Entro y, yo seguí revisando los reportes, no lo voltee a ver pero, por el olor a embriagues, supe que era él. De pronto, vi como se clavo en mi escrito una navaja, a poco menos de 5 cm de donde estaba la hoja donde hacia mis garabatos apenas unos segundos antes, voltee a verlo fríamente y me recargue en el respaldo de mi silla, inclinándome un poco hacia atrás, dio un paso al frente tomo la navaja enterrada en el escritorio, y empuñándola amenazadoramente me dijo:
― dame otra incapacidad cabrón. ―
Lo voltea a ver yo seguía sereno y para nada me sentía amenazado por el pendejete ese, le dije ― ¿ya se te acabo la anterior? ―
― Si y dame otra y dámela por mas días para no estar viniendo a esta pocilga. ―
Deje los papeles que revisaba a un lado, mientras me acomoda para sentarme, como Dios manda, y abrir enseguida el cajón para sacar el block de las incapacidades.
Le pedí que tomara asiento, a lo cual movió una de las sillas arrastrándola por el suelo, haciendo ruido por la falta de los tapones plásticos inferiores. Faltos ya clásicos en las sillas del seguro, si, de la clínica Unidad Familiar del Seguro Social No1, en Castaños, se sentó y subió su botas dejando pequeños trozos de lodo semi-seco sobre mi escritorio luego que subió las patas, porque no se le puede llamar de otra forma, al mismo. El se puso a jugar con la navaja, lo seguí mirando fríamente, tome mi pluma, abrí el cajón para sacar las incapacidades y darle una al “infeliz paciente” y le pregunte ― ¿por cuantos días la quieres? ― y me respondió ― por mas días, como quiera, te voy a dar tus 50 pesos por cada semana que me des de incapacidad ― sonreí y moví mi mano derecha para abrir el cajón, volteé el mismo y vi las incapacidades, estaba apunto de tomarlas cuando en la parte interior del cajón observe la pistola pensé unos segundos y opte por tomarla, me incorpore rápidamente mientras me movía y lo encañonaba en la cabeza y le decía ― ¿qué es lo que quieres hijo de tu puta madre?, ¿que es lo que quieres hijo de la chingada? ― lo estire del cabello tumbándolo de la silla, empecé a caminar arrastrándolo de los pelos, abrí la puerta de mi oficina y avance por el pasillo principal ante las miradas, murmullos, y hasta, lamentaciones de las señoras que esperaban turno para que las revisaran a ellas o a sus mocosos, llegamos a la entrada principal y sin soltarlo de la cabeza levante mi bata blanca del seguro y, me puse la pistola en la espalda sujetada con el pantalón para luego tomarlo con las dos manos, lanzándolo a los escalones mientras le dije ― ¡vaya a la chingada hijo de su reputa madre! ― di media vuelta y entre de nuevo, con rumbo a mi oficina mientras seguía escuchando entre los murmullos “ay ese es el doctor malo” y los niños se escondían tras las faldas de sus madres, me miraban todos con los ojos a punto de desorbitarse. Entre a mi oficina, cerré la puerta recogí la silla, levante la navaja y la cerré, me senté de nuevo en mi escritorio, guarde mi pistola y mi nueva navaja, tome de nuevo los reportes para continuar revisándolos, y sonreí de nuevo felizmente."

lunes, 18 de diciembre de 2006

 

listening: Panda[Mi Muñeca]

"I couldn’t sleep. With insomnia, nothing is real. Everything is far away, everything is a copy of a copy of a copy...
When you have insomnia, you’re never really asleep and you’re never really awake"


"Dad, now what? He says I don’t know. Get married. You can’t get married. I’m a 30 year-old boy. We’re a generation of men raised by women. I’m wondering if another woman is really the answer we need."


Men is that we are


ya me cargo el payasho...

















"Every time the plane banked too sharply on take off or landing, I prayed for a crash or a midair collision. Anything. Life insurance pays off triple if you die on a business trip…
An exit-door procedure at 30,000 ft. the illusion of safety."

lunes, 11 de diciembre de 2006

 

listening: Leyendas y Raíces[En Un Segundo Después]

"Llegué a mi casa, triste, sucio y cansado. Hubiera debido comer algo, pero no me sentía con fuerzas siquiera para alimentarme. Tomé un baño y me fui a dormir. Pero el sueño no deseaba sino atormentarme. Como si hubiera penetrado en una casa repleta de estancias, me vi arrastrado hacia imágenes de mi infancia cuando la vida en Sefarad era placida, y luego al momento en que conocí a Susana y, por ultimo, al día en que nos vimos obligados a confesar que no existía otro dios que Allah y que Muhammad era su profeta.

Me desperté, entonces angustiado y cubierto de sudor, pero esta vez, a diferencia de otras, pude volver a conciliar el sueño. Esta vez me vi trasladado en mis delirios oníricos a los días en que llegamos mi padre, mi hermano y yo a Marruecos y a la marcha posterior a Erets Israel. Y volví a ver a aquel personaje extraño que en la tierra que Adonai había dado a Israel había turbado hasta el fondo de nuestros corazones, a Haim ben David. Sin embargo, en mi sueño no me atormentaba explicándome que la Torah y los neviim enseñan que Yeshua ha-Nostri era el mesías. No, por el contrario, me sonreía y desplegaba ante mi una meguil·lah cuyo contenido era exacto no me era dado a leer. Me esforzaba en hacerlo, naturalmente, porque algo en mi interior me decía que en aquellas líneas había un mensaje que me resultaba indispensable conocer. Pero ¿cuál era? No podía saberlo porque cada vez que me acercaba e intentaba posar mis ojos las letras se volvían borrosas desvaneciéndose ante mi mirada como si hubieran sido escritas con arena y sobre ellas hubiera soplado un viento impetuoso.

Susana, Susana."

domingo, 10 de diciembre de 2006

 

listening: misa

definitibamente eres la "mamada" andando

viernes, 8 de diciembre de 2006

 

listening: Edgar Vasquez[15 o 20 tragos]

que CHIDOTE!!! es cuando Dios te habla... y te dice todo lo que necesitabas escuchar...



"que bonita es la vida del hombre siempre tiene con quien vacilar aunque aveces la suerte nos falle es bonito perder y llorar..."

 

listening: Jaime y los Chamacos[Yo No Te Voy Hacer Llorar]

"You're not your job. You're not how much money you have in the bank. You're not the car you drive. You're not the contents of your wallet. You're not your fucking khakis. You're the all-singing, all-dancing crap of the world."

por cierto ya esta lista la pagina de la pelicula de mana pa que le echen un ojo luego aviso cuando vaya a ser presentada de nuevo aqui en mty http://www.acadacerdo.com/

"ya no tengo esperanza un perdido seré, mi alma pide descansar, esta noche pienso emborracharme, pero no pienso despertar..."

jueves, 7 de diciembre de 2006

 

listening: Linkin Park[Somewhere I Belong]

"-Shalom -dijeron Abul Maali y su compañero casi al unísono.

-Shalom lehitraot -respondí

Cruzaron la calle y vi como se reunían con dos hombres y dos mujeres. Los varones eran siervos, sin duda. Pero ellas... podrían ser perfectamente sus esposas por la edad que se deducía mirándolas, aunque bueno se me hacía difícil creer que hubieran traído a sus mujeres. ¿bueno que más daba?

Los seguí con la mirada mientras se alejaban calle arriba. De repente, se desato un viento impetuoso, inesperado, bronco. Las mujeres sujetaron los velos para mantenerlos sobre el rostro, pero en apenas un instante me pareció que les faltaban manos para lograr que el resto de sus atavíos permanecieran en su sitio. Y entonces sucedió. Un golpe de aire desprendió el pedazo de tela de la más joven elevándolo como si se tratara de un pájaro ansioso de remontar el vuelo.

La muchacha echo a correr detrás de la prenda y eran tanto su azoramiento que, sin dejar lugar a ninguna otra consideración, también yo intenté atrapar aquel velo. Lo conseguí cuando, por un instante, ceso el viento y la pieza de tela se desplomo sobre el suelo de la misma manera que lo habría echo una paloma sobre la que se hubiera abatido un halcón.

Al levantar la vista, ya con el velo en la mano, la vi. Su cabello, largo, castaño y ondulado, se había soltado y le caía en cascada sobre los hombros. Sin embargo, a pesar de su hermosura, no era lo que mas llamaba la atención de su rostro. Su mentón acariciado por un leve hoyuelo, sus pómulos redondeados y suaves, su boca alargada pero no grande constituían otras tantas muestras de gracia delicada que me dejaron clavado en el lugar donde me encontraba sin permitir que me moviera.

Al percatarse de que la miraba, bajo los ojos pudorosamente y dijo:
-Sayidi, ¿puedes devolverme el velo?

Fueron aquellas palabras las que me devolvieron al lugar que me encontraba. Tosí molesto y le tendí la prenda, que tomo para atársela rápidamente y cubrirse el rostro. La vi alejarse en dirección a Abul Maali y al resto del grupo y mientras lo hacia, desee que volviera la mirada para poder contemplar una vez mas aquellos ojos que por un solo instante, había visto. Lo ansié con toda la fuerza de mi corazón. Casi hasta que el anhelo me hizo daño en el pecho. Pero, ella, sin mirar atrás un solo instante, prosiguió su camino hasta perderse en el horizonte."

miércoles, 6 de diciembre de 2006

 

listening: Sixpence[With Every Breath]

The Emperor of China: The flower that blooms in adversity is the most rare and beautiful of all.
Shang: Sir?
The Emperor of China: You don't meet a girl like that every dynasty.

martes, 5 de diciembre de 2006

 

listening: I Can only imagine

http://www.youtube.com/watch?v=sJdP37YVgng


 

listening: Masizzo[Solamente Mia]

Life insurance pays off triple if you die on a business trip.

sábado, 2 de diciembre de 2006

 

listening: Ramon Ayala Jr.[Cuanto me cuesta]

My name is Robert Paulsen